Cómo Mantenerse Despierto en la Iglesia
Ayer, compartí con ustedes un extracto del “Manual Presbiteriano.” Dicho libro tiene todo lo que se necesite para saber sobre ser presbiteriano en un formato corto y a menudo humorístico. Gran parte se aplica a la fe Cristina en general. Incluso hay una sección muy divertida sobre “Cómo permanecer (despierto) en la iglesia.” Déjenme compartir con ustedes los seis mejores:
1: Duerme lo suficiente. El sábado por la noche es el peor enemigo del domingo por la mañana. Resuelve descansar temprano.
2: Llegue temprano a la iglesia y encuentre el lugar en donde se sirve el café.
3: Concéntrate en tu postura. Siéntate derecho con los pies plantados firmemente en el piso. Evita encorvarse ya que esto fomenta la somnolencia.
4: Beba mucha agua, aunque no demasiada. Es más fácil permanecer alerta cuando estás bien hidratado. Un pequeño receso para ir al baño se considera permisible. Dos o más son de mal gusto.
5: Manténgase alerta flexionando los grupos musculares en cierto patrón. Apretar los pies; flexiona los músculos de la pantorrilla, muslos, glúteos, abdomen, manos, brazos, pecho y hombros. Repetir. Evite agitarse, o balancearse u otros movimientos que atraigan atención indebida.
6: Si todo lo demás falla, ¡considera pellizcarte! Intenta no gritar.
Sucede, ¿Verdad que sí? ¿Sabías que, en el Libro de Hechos, una vez en que predicaba Pablo, un miembro de su congregación se durmió y cae por la ventana de un segundo piso? ¡Pablo baja para sanarlo, y luego sigue predicando!
Espero que esta lista te haya colocado una sonrisa en tu cara. Yo también espero que la adoración en tu iglesia sea vibrante y viva, y que llegues esperando encontrar la presencia del Dios vivo. Yo sé que cuando nos presentamos completamente alerta y presentes, Dios es glorificado y es más probable que seamos nutridos.
Oremos: Dios Santísimo, la mayoría de nosotros hemos tenido momentos en los que nos ha costado participar en la adoración. A veces nuestras mentes divagan y nuestros cuerpos se inquietan. Pero confiamos en que conoces nuestros corazones. Queremos honrarte. Queremos mostrar nuestro amor y gratitud. Queremos saber de ti, y queremos estar sanos y plenos.
Oro para que esta semana, nos prepares para encontrarte en adoración. Que podamos notar tu presencia en las canciones que cantemos, en las palabras que se expresan y las que no se expresan, en la belleza del santuario y en las personas con las que reunimos. Lo pedimos en el nombre de Jesús. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!