Una Carta Preparada por Otros
Ayer reflexionamos sobre la segunda carta de Pablo a los Corintios. Él escribió:
«Ustedes mismos son nuestra carta, escrita en nuestro corazón, conocida y leída por todos. Es evidente que ustedes son una carta de Cristo, expedida por nosotros, escrita no con tinta sino con el Espíritu del Dios viviente; no en tablas de piedra sino en tablas de carne, en los corazones.» (2 Corintios 3:2-3)
Ahora bien, es interesante. Pablo dice que son una carta de Cristo, pero luego añade: Expedida por nosotros…es decir, por su ministerio y el ministerio de otros junto a él. Así que Pablo reconoce que Dios usa a otros para ayudar a escribir esta carta…que las personas impactan nuestros corazones y nuestras vidas de tal manera que moldean nuestros valores, nuestra forma de vivir, y el tipo de relaciones que tenemos.
Si tu vida es una carta, ¿quién te ha ayudado a preparar esa carta?
Pienso en mi propia vida, pienso en mi madre y mi padre, observando su generosidad, hospitalidad y preocupación por los demás. Mi abuelo fue otro que tuvo un gran impacto en mi vida…Herb Meza fue otro. Sin duda, hubo maestros. Me viene a la menta la Sra. Barringer, mi maestra de séptimo grado. Ella tenía un gran corazón para los desfavorecidos.
Si mi vida es una carta siendo escrita por Cristo, hay muchos a lo largo del camino que han ayudado a prepararla. Y estoy seguro de que eso también aplica a ti.
La verdad es que sí podemos elegir a quién le permitimos dar forma a esta carta…Podemos elegir de qué ejemplo nos inspiramos…Sé que muchos hemos tenido personas en nuestras vidas que nos han traicionado, herido, o dado un ejemplo muy negativo. Y sé que puede ser tentador culparlos o culpar a otras malas experiencias por nuestras propias acciones negativas. Pero, en realidad, sí podemos elegir, ¿no es así?
No importa la edad que tengamos, esta carta, que es nuestra vida, sigue escribiéndose. Cristo sigue buscando hablar en nuestras vidas y a través de ellas…
Si tu vida es una carta, ¿qué quieres que diga? ¿A quién quieres permitirle moldearla?
Oremos: Dios de gracia, te damos gracias hoy por las personas que han influido positivamente en nuestras vidas y por quienes, incluso ahora, contribuyen a moldear nuestra fe. Ayúdanos a siempre buscar a las personas adecuadas. Te agradecemos que aún no hayas terminado con nosotros; por Jesucristo. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!
