El Efecto Multiplicador
Un pequeño perro había sido golpeado por un vehículo y estaba herido y acostado a orilla de la carretera. Un médico pasaba en su vehículo notó que el perro todavía estaba con vida, detuvo su vehículo, levantó al perro y se lo llevó a su casa. Allí descubrió que el perro había estado aturdido, había sufrido cortes y raspaduras menores, pero por lo demás estaba bien. El revivió al perro, limpió sus heridas y cargaba al animal de la casa al garaje cuando de repente saltó de sus brazos y echó a correr. “Qué perrito tan ingrato”, el médico se dijo a sí mismo. Él no pensó más sobre el incidente hasta la noche siguiente, cuando escucho que rasguñaban la puerta. Cuando abrió la puerta, allí estaba el pequeño perro que había atendido, con otro perro herido.
Esa es la historia del “efecto multiplicador.” Tira una piedra en un lago y las ondas van hacia afuera, y el círculo se ensancha. Una de las grandes características de los primeros cristianos era su efecto multiplicador. Algo les había sucedido a ellos por los que los llenó de alegría que simplemente no lo podían contener. Era contagioso. Se esparció entre la gente en un efecto multiplicador. Y el círculo de amor creció más y más.
Oremos: Señor, ayúdanos a difundir tu amor siendo el Evangelio, la buena noticia a los demás. Concede sanación a aquellos que están enfermos o ansiosos el día de hoy y recuérdanos del poder de tu espíritu, que transforma cualquier situación terrenal. Concede fuerza a los débiles y esperanza a los deprimidos. Mantén en seguridad a todos los que viajan. Vela por los pobres y a los desamparados. Ahora deja que el efecto multiplicador de tu amor y alegría nos ayude a hacer de este día una obra maestra. Por Jesucristo nuestro Señor, Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!
Daily Message Author: El Rev. Dr. Roger Kunkel
(November 24, 1934 – June 29, 2011) Biografía