Tiempo Alrededor de la Mesa
Hace poco leí sobre un estudio que descubrió que los niños que regularmente cenan con sus familias tenían menos probabilidades de ser capturados por las drogas o abandonar la escuela. De hecho, era mucho más probable que les fuera bien en la vida y se mantuvieran fuera de problemas graves. Eso es interesante, ¿verdad que sí?
Hay algo acerca de realmente detenerse por unos momentos para sentarse y compartir comida y conversaciones que son buenas para el alma. Esto es cierto para niños y adultos. La mesa une nuestras vidas – aunque solo sea por poco tiempo. Si no nos distraemos con la tecnología, nos brinda la oportunidad de hablar, de reflexionar sobre el día y construir relaciones.
En las casas Judías, en los días de Jesús, e incluso en algunas casas hoy en día, la mesa de la cena era vista como un tipo de altar. El tiempo que pasabas con familiares y amigos era tiempo que se pasaba en presencia de Dios – tiempo sagrado. Santo. Que sea para ti también.
Oremos: Amado Dios, te agradecemos por los amigos y familia y por la comida para disfrutar. Estamos agradecidos por el amor que es evidente en la providencia de la comida en sí – y por el amor que fluye a través de la preparación, al servir e incluso al limpiar. Te agradecemos especialmente el regalo de una comida, la risa y la conversación, las lágrimas y los triunfos compartidos. Ayúdanos a apreciar estos momentos, invitar a otros y compartir con los más necesitados. Lo pedimos en el nombre de Jesús. Amén
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!