Tenemos Todas las Razones para Tener Esperanza
Hay una vieja historia sobre una mujer pobre pero fiel que era vecina de al lado de un ateo que siempre estaba de mal humor. A menudo el ateo le ponía las cosas difíciles, “Señora usted está loca – orando así todo el tiempo – perdiendo el tiempo atendiendo a la iglesia. ¿Acaso no sabes que no hay un Dios?” Pero la mujer permaneció fiel a sus creencias.
Un día, la mujer se quedó sin provisiones alimenticias. Como de costumbre, estaba orando al Señor explicándole su situación. Resultó ser que el ateo escuchó su oración y se dijo a sí mismo, “Hum…yo le enseñaré.”
Él fue a la tienda de conveniencia, compró una gran cantidad de comestibles, los llevó a la casa de la mujer pobre, los dejó a la puerta de su casa, tocó el timbre y luego se escondió en los arbustos para ver qué hacía la mujer. Cuando abrió la puerta y vio los víveres, ¡comenzó a alabar al Señor con todo su corazón, saltando, cantando y gritando!
Entonces el ateo salió de los arbustos y le dijo: “Señora vieja y loca. Dios no te compró esos víveres, ¡yo compré esos víveres! Bueno, ella se exaltó y comenzó a correr por la calle, gritando y alabando a Dios aún más. Cuando él finalmente la alcanzó, le preguntó que cuál era su problema…Ella dijo: “Sabía que el Señor me proveería con algunos víveres, ¡pero yo no sabía que iba a hacer que el diablo pagara por ellos!”
La historia es divertida – pero el punto está bien enfocado. ¡Dios puede y obrará a través de cualquiera!
A veces es difícil tener esperanza porque no podemos creer que hay una respuesta a nuestras oraciones. No podemos imaginarnos cómo las cosas se resolverán o funcionarán. Siendo humanos, nuestra visión y entendimiento son limitados. Pero en el corazón mismo de nuestra fe está el Dios que abre caminos – incluso cuando no existe alguna forma.
Oremos: Dios Eterno, de la bodega de un establo, nos resucitaste a un Salvador. De la tumba sellada, produjiste nueva vida y nuevas posibilidades. Ayúdanos a confiar que tú harás un camino el día de hoy – incluso para nosotros. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!