San Patricio
Está registrado que San Patricio fue secuestrado por traficantes de esclavos cuando tenía solo 16 años. Lo llevaron de Gran Bretaña a Irlanda, donde trabajó como esclavo durante seis años antes de escapar. Años más tarde, en un asombroso acto de valentía y fe, Patricio escuchó el llamado de Dios para regresar a Irlanda como misionero, compartiendo el Evangelio del amor de Cristo incluso con aquellos que antes lo habían encarcelado.
Hoy los dejo con una porción de una oración que se le atribuye titulada La Lorica de San Patricio o “Grito del Ciervo”. La espiritualidad Celta Cristiana primitiva, en el que Patricio estaba inmerso, es terrenal. Afirmó la presencia de Cristo infundida en toda la creación, y recurre a esta presencia para su protección. Los invito a leer esto lentamente, reflexionar sobre estas palabras, empaparse en ellas y hacerlas suyas.
Oremos:
Para mi escudo este día:
Me levanto hoy
Por medio de poderosa fuerza,
la invocación de la Trinidad,
Por medio de creer en sus Tres Personas,
Por medio de confesar la Unidad…
Me levanto hoy
Por medio de la fuerza de Dios que me conduce:
Poder de Dios que me sostiene,
Sabiduría de Dios que me guía,
Mirada de Dios que me vigila,
Oído de Dios que me escucha,
Palabra de Dios que habla por mí,
Mano de Dios que me guarda,
Sendero de Dios tendido frente a mí,
Escudo de Dios que me protege…
Cristo conmigo,
Cristo frente a mí,
Cristo tras de mí,
Cristo en mí, Cristo a mi diestra,
Cristo a mi siniestra,
Cristo al descansar,
Cristo al levantar,
Cristo en el corazón de cada hombre que piense en mí,
Cristo en la boca de todos los que hablen de mí,
Cristo en cada ojo que me mira,
Cristo en cada oído que me escucha.
Que tu salvación, Señor, esté siempre con nosotros. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!