Risa
Puede ser que estés muy bien familiarizado con la Oración de la Serenidad: Dios concédeme serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las cosas que puedo, y la sabiduría para reconocer la diferencia.
Es una oración poderosa que ha cambiado muchas vidas.
Un amigo me compartió una vez la “Oración de Senilidad.” Está oración fue publicada por una mujer, de avanzada edad, que estaba a las puertas de su jubilación, y dice así: Dios, concédeme senilidad para olvidar a las personas que nunca me han gustado, la buena fortuna para encontrarme con las personas que me gustan, y la vista para distinguir la diferencia.
Eso es gracioso. Y es poderoso por derecho propio – y eso está en su poder para hacernos reír. Es posible que hayas notado que el humor puede ayudarnos a lidiar con algunos de los aspectos más difíciles de la vida. Rompe la tensión, alivia el estrés, y nos conecta a un nivel más profundo. La ciencia nos dice que la risa puede apoyar el sistema inmunológico, mejora la presión arterial, estimula los órganos y reduce el dolor.
De vez en cuando, espero que puedas reírte ante los problemas de la vida. Y al hacerlo, no sólo que te sientas bien, sino ser mejor.
Oremos: Amado Dios, reconocemos que la vida no es fácil. De hecho, a menudo es francamente difícil. Te agradecemos hoy por el regalo de la risa, y por las personas en nuestras vidas que nos hacen sonreír y reír. Te pedimos que nos ayudes a encontrar humor incluso en los momentos más oscuros de la vida, y que sea un recordatorio de tu amor y preocupación por nosotros. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!