¿Qué es lo que hay en un Nombre?

El mensaje de hoy fue escrito por el pastor invitado Rev. Andy Odom. 

Sagradas Escrituras: Pero ya han sido lavados, ya han sido santificados, ya han sido justificados en el nombre del Señor Jesucristo y por el Espíritu de nuestro Dios. (1 Corintos 6:11) 

Recientemente leí una historia sobre una maestra en un área empobrecida de Colorado, que pasa por la misma experiencia cada año cuando aprende los nombres de sus nuevos alumnos. Cada vez que lo hace, inevitablemente, encuentra un nombre que tiene más de una pronunciación. Cuando se le pide al alumno la pronunciación correcta, la respuesta típica es: “Lo que sea que esté bien”. Es entonces cuando la maestra se detiene y, con claridad en su voz, responde: “No, no es así. Es tu nombre. Dime cómo pronunciarlo.” Su esperanza en hacer dicha práctica es de ayudar a los estudiantes a comprender la importancia de sus nombres. Para algunos, dijo ella, es todo lo que tienen.

La vida es incierta y viene sin garantías. No tiene ninguna promesa de que mañana será mejor que hoy. Pero cuando somos bautizados, Jesús nos llama por nuestro nombre y luego nos da su nombre. En medio de la incertidumbre de la vida, el nombre que está por encima de todos los nombres se nos da de manera generosa y abundante, impreso en nuestras propias almas. Dios nos reclama en el bautismo, prometiéndonos una vida llena del sonido de su voz y la confianza de su presencia, el que continúa llamándonos por nuestros nombres. Después de todo, nada es tan personal como un nombre. Al final, es todo lo que realmente tenemos, y es suficiente.

Oración: Dios misericordioso, tú nos has creado a cada uno de nosotros. Has prestado especial atención a quiénes somos y quiénes podemos ser. Somos tus hijos, y tú nos llamas por nuestros nombres. Danos oídos para escuchar tu voz, corazones para saber que estás cerca, y manos para alcanzar a otros, en el nombre de Cristo oramos. Amén

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