Nueva Vida

El otro día, estaba escuchando una entrevista con un monje Benedictino, David Steindle Rast. Él estaba hablando sobre la ansiedad – que muchos de nosotros hemos estado sintiendo en estos días.

Él dijo: “Tenemos que reconocer nuestra ansiedad, pero no debemos temer. (Y) hay una gran diferencia. Verás, ansiedad…o estar ansioso – esta palabra proviene de una raíz que significa ‘estrechez’ y ‘asfixia’. La ansiedad original es nuestra ansiedad de nacimiento. Todos llegamos a este mundo a través de este incómodo proceso de nacer…Es realmente una lucha de vida o muerta tanto para la madre como para el niño…”

Él continuó diciendo que si dejamos ir el miedo, “…las perores ansiedades y los perores momentos difíciles de nuestra vida, a menudo, años después, cuando miras hacia atrás, se revelan como el comienzo de algo completamente nuevo, una vida completamente nueva.”

Estaba escuchando esto y me hizo pensar en algunos de mis amigos que perdieron su negocio familiar durante la última gran recesión en el 2008. Había estado en su familia por años. Ellos tenían dos hijos que todavía estaban en la escuela secundaria en ese momento, y la pérdida fue simplemente devastadora. Les preocupaba perder la casa – cómo iban a cubrir sus gastos básicos. ¡Esto sí que es ansiedad!

Pero Dios se movió en sus vidas durante ese tiempo. Dios produjo algo nuevo. Mi amigo me dijo que toda esta experiencia los unió como familia – unidos de una manera que nunca hubieran imaginado. Ellos comenzaron a experimentar un nivel completamente nuevo de gratitud por las cosas que tenían. No pasó mucho tiempo después de que mi amigo se inscribiera en el seminario. Yo fui a su servicio de ordenación hace dos años, y hoy está sirviendo en una iglesia Presbiteriana en Jacksonville.

Si lo pensamos bien, todos hemos visto momentos en los que el dolor y el sufrimiento, la confusión y la ansiedad dan paso a una nueva vida…

Todo esto me hace preguntarme acerca de todo lo que estamos pasando en este momento…en nuestro mundo, en nuestra iglesia. ¿Aún serán dolores de parto?…No creo que Dios haya traído esto, pero podría ser que a través de esto, Dios está trabajando incluso ahora para producir algo nuevo…

Oremos: Dios misericordioso, hoy oro para que nos ayudes a dejar ir el miedo y, en cambio, buscar el potencial. Que confiemos en que estás obrando – incluso ahora – incluso a pesar de todo esto, para hacer todas las cosas nuevas. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!