LECCIONES PARA VIVIR
Cuando se le preguntó en su cumpleaños número 74 de lo que pensaba de envejecer, la talentosa poetisa, Dra. Maya Angelou, respondió con estas palabras:
Aprendí que no importa lo que pase o lo mal que parezca el día de hoy, la vida continúa y será mejor mañana.
Aprendí que se puede decir mucho de una persona por la forma en que maneja tres cosas: Un día lluvioso, equipaje perdido y luces del árbol de Navidad enredadas.
Aprendí que, independientemente de tu relación con tus padres, los extrañarás cuando no estén en este plano terrenal.
He aprendido que ganarse la vida trabajando no es lo mismo que vivir la vida.
Aprendí que no debes ir por la vida con un guante de receptor en ambas manos; necesitas poder tirar algo de regreso.
Aprendí que incluso cuando tengo dolores, yo no necesito ser uno.
Aprendí que todos los días debes acercarte y tocar a alguien. A las personas les encanta un abrazo cálido o simplemente una palmadita amistosa en la espalda.
Aprendí que todavía tengo mucho que aprender.
Aprendí que las personas olvidarán lo que dijiste y olvidará lo que hiciste, pero nunca olvidarán la forma en cómo les hiciste sentir.
Las sabias palabras de la Dra. Angelou ofrecen estas valiosas lecciones sobre la vida para que todos lo consideremos:
-Mirar hacia adelante a cada nuevo día.
-No te dejes llevar por ti mismo.
-Apreciar las bendiciones de la vida.
-Estar ahí para los demás.
Dios nos dio la vida con un propósito mis amigos. Cumplir con ese propósito puede ser estimulante.
Oremos: Enséñanos a exprimir el significado y el propósito de todos y cada día, Señor. Recuérdanos que no necesitamos tener todas las respuestas para experimentar las alegrías de la vida. Anímanos a compartir siempre el don de la alegría sin fin que primero has compartido con nosotros a través de tu Hijo, Jesucristo. En su nombre oramos. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!