La Marea Vendrá…
El mensaje de hoy fue escrito por Roger Kunkle, q.e.p.d., fundador de Dial Hope.
Es significativo para mí que las tres iglesias donde he servido como pastor están ubicadas cerca del agua. En Duluth, Minnesota, la iglesia se ubicaba a varias cuadras del Lago Superior. En Chicago, la iglesia se ubicaba a una cuadra del Río Des Plaines. Y en Sarasota, Florida, estaba cerca del Golfo de México.
Si alguna vez has visitado Sarasota, sabes que algunas de las playas más hermosas del mundo se encuentran en esta área. A veces, cuando caminaba por la playa, me sentía abrumado por lo grande que es el océano y lo pequeño que yo soy. Entonces, recuerdo que la Biblia dice en el Salmo 95:4-5: “En sus manos están los abismos de la tierra…Suyo es el mar, porque él lo hizo.”
Hay uno que es más grande que el océano, hay un Dios que nunca ha estado indefenso. Al darse cuenta de eso, tu fe se fortalece y te sientes sereno sin miedo. A medida que vives cerca del agua, cerca del océano, se llega a una mejor comprensión de la vida porque los dos son muy parecidos. La vida misma tiene una inmensidad que está más allá del alcance de nuestra vista. Pero podemos decir con el Salmista: “Pero yo, Señor, en ti confío…Mi vida entera está en tus manos.” (Salmo 31:14, 15)
Creemos que nada puede suceder en nuestras vidas que Dios no pueda manejar. Y eso nos da confianza y fe y esperanza a medida que pensamos en el mañana.
Hay muchos paralelos entre la vida y el océano. Nosotros experimentamos tiempos de marea baja y marea alta y no hay forma de detener esos lazos. Si nos damos cuenta de que experimentamos mareas bajas de espíritu, nuestros momentos de desánimo perderán gran parte de su terror. La marea vendrá. Sí, la marea puede salir, igual que seguramente volverá.
Hay momentos en que estamos ansiosos por lograr algo; pero hay momentos en que debemos “esperar la marea.” Pero en la espera, estamos seguros de que la marea subirá, y debido a esa certeza tenemos fe y esperanza. Dígase a sí mismo, “Mis tiempos están en sus manos,” y obtendrás serenidad, tranquilidad y confianza. Mis tiempos están en manos de Dios.
Oremos: Amado Dios, cualquier dificultad que estemos enfrentando, recuérdanos que la marea vendrá. Que tu presencia, tu paz, tu confort, fluya sobre nosotros como aguas curativas, bautizándonos en tu amor, mezclando tu bálsamo con nuestras lágrimas para crear aguas vivas, para el mañana. Todas estas cosas oramos en el nombre de tu Hijo, nuestro Salvador, Jesucristo que vivió como uno de nosotros. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!
Daily Message Author: El Rev. Dr. Roger Kunkel
(November 24, 1934 – June 29, 2011) Biografía