En la Espera
Santiago escribe a la comunidad Cristiana primitiva: “Por tanto, hermanos, tengan paciencia hasta la venida del Señor. Miren cómo espera el agricultor a que la tierra dé su precioso fruto y con qué paciencia aguarda las temporadas de lluvia. Así también ustedes, manténganse firmes y guarden con paciencia la venida del Señor, que ya se acerca.” (Santiago 5:7-8)
Es más fácil decirlo que hacerlo, ¿verdad que sí?
Ser paciente…
Es interesante. Casi todas las tradiciones filosóficas y religiosas importantes enseñan paciencia. ¿Por qué es eso? ¿Dónde está el valor en ello?
En la tradición budista, existen personas conocidas como Bodhisattavas. Un Bodhisattava es alguien que ha sido iluminado, y que ha elegido ser un maestro espiritual para los demás. La única advertencia es que las personas comunes y corrientes no pueden distinguir quién es un Bodhisattava y quién no. Podría ser cualquiera.
Entonces, en nuestra familia tenemos una especie de broma: Las personas difíciles en nuestras vidas son nuestros Bodhisattvas. Están aquí para enseñarnos humildad, paciencia y amor…Si bien es un poco divertido pensar en el dependiente del supermercado que es super lento, deteniendo toda la fila de la caja, como maestro, al mismo tiempo, es un recordatorio que por más difícil que sea este momento, hay algo que aprender Quizás esté sucediendo algo más profundo.
Santiago dijo: “Miren cómo espera el agricultor a que la tierra dé su precioso fruto y con qué paciencia aguarda las temporadas de lluvia…” La semilla está ahí. Y aunque no podemos ver lo que está sucediendo, claramente algo está sucediendo…
Quizás se esté realizando una obra interna. Quizás la espera esté abriendo otras oportunidades…Quizás haya algo que se supone que debo recibir, o algo que se supone que debo hacer por los demás. Quizás esta interrupción, este retraso sea en realidad un regalo…
El pastor y escritor coreano-estadounidense Joshua Kang afirma que la paciencia es un requisito previo para la paz – la paz interior – pero no sólo eso. Él escribió: “Las personas que tienen paciencia nada le falta. Las personas que tienen paciencia lo tienen todo.”
En tu espera, que puedas confiar en que algo más profundo, tal vez algo imperceptible o aún no detectado está obrando en ti. Que puedas buscar las oportunidades que se presenten – oportunidades de conexión, de dar, de recibir – que abundan en la espera. Y que tu paciencia desarrolle en ti una fuerza interior y reserva.
Oremos: Concédenos la paz en nuestra espera, Oh Dios. Fortalece nuestros corazones y ayúdanos a confiar en que estás cerca, incluso ahora. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!