Del Polvo de la Tierra

Del Polvo de la Tierra

El día de hoy, quisiera dar unas palabras especiales de agradecimiento a todos aquellos que han apoyado a la Fundación Dial Hope (Digita Esperanza) con una donación económica. ¡Tus aportes hacen posible este ministerio!

Es interesante para mí que la palabra Adán en hebreo significa hombre o humanidad, y la palabra Adama significa polvo o tierra. En el libro de Génesis, leemos que Dios creó a Adán desde el polvo de la tierra y respiró en él el Espíritu de Vida. Adán viene de Adama.

En otras palabras, nosotros estamos, literalmente, hechos de las mismas cosas que el resto de la tierra; los mismos elementos de toda la creación. Sí, Dios nos da vida a través de su Espíritu, pero, hay una conexión a la tierra en las profundidades mismas de quienes somos.

Algunos de ustedes pueden sentir dicha conexión cuando están excavando en su jardín, cuando sientes la tierra en tus manos. Otros de ustedes pudiesen sentirlo cuando están en el bosque, en las montañas o en la playa.

Vivimos en una época en la que a menudo nos desconectamos de la tierra. Nuestros hogares, oficinas y automóviles son climatizados. Tenemos opciones interminables para mantenernos entretenidos y ocupados sin tener que salir al aire libre. Pero cuando esto sucede, a menudo también perdemos nuestro sentido de asombro y temor de ser parte de algo mucho más grande.

Esta semana, haz tiempo para salir al aire libre y disfrutar de la luz del sol, la lluvia, el canto de los pájaros y la belleza de la estación del año. Apaga el iPod, el teléfono celular y simplemente maravíllate con la creación de Dios – de la cual eres una parte integral.

La oración de hoy proviene del Himno, “Cuan Grande Es Él.” Oremos: Oh Señor, mi Dios, cuando yo estoy con asombro maravilloso al considerar todos los mundos que tus manos han hecho, al contemplar las estrellas, al oír tu voz en los potentes truenos, tu poder a través de la exhibición del universo. Al recorrer los montes y los valles, y los claros del bosque en donde camino y oigo los pájaros cantar dulcemente en los árboles. Cuando miro hacia abajo, desde la majestuosa grandeza de la montaña y veo el arroyo, y siento la suave brisa. Entonces mi alma entona la canción, Mi Dios Salvador, a ti, ¡Cuán Grande es Él, Cuán Grande es Él! Amén.

¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!

Daily Message Author: Joe Albright

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