Expresando Nuestra Gratitud

En su autobiografía, Breaking Barriers (Rompiendo Barreras), el columnista sindicado Carl Rowan habla de una maestra que influyó mucho en su vida. Rowan escribió: La señorita Thompson metió la mano en la gaveta de su escritorio y sacó una hoja de papel que contenía una cita atribuida al arquitecto de Chicago Daniel Burnham. Yo escuché atentamente mientras ella leía: “No hagas planes pequeños; no tienen magia para agitar la sangre de los hombres y probablemente ellos mismos no se realizarán. Haz grandes planes, apunta alto con esperanza y trabajo.” Más de 30 años después, di un discurso en el que dije que Frances Thompson me había dado una fe en mí que necesitaba desesperadamente. Un periódico publicó la historia, y alguien envió por correo el recorte del periódico a mi amada profesora. Ella me escribió: “Tú no tienes idea de lo que significa para mí esa historia del periódico. Durante años, he soportado los argumentos de mi hermano de que había desperdiciado mi vida. De que debería haberme casado y tener una familia. Cuando leí que me habías dado crédito por ayudar a lanzar tu maravillosa carrera, yo puse el recorte del periódico en frente de mi hermano. Después de que él lo leyó, le dije: “Verás, realmente no desperdicié mi vida, ¿Será que lo he hecho?”

Es importante saber que se nos aprecia, y que nuestros esfuerzos son importantes. Es bueno para el alma escuchar palabras de agradecimiento de alguien a quien hemos cambiado su vida. ¿Qué hermoso sería si todos tuviéramos el hábito de acercarnos con regularidad a aquellos que han marcado una diferencia en nuestras vidas o que nos han servido, para expresarles nuestro más sincero agradecimiento?

 En muchas ocasiones, el Apóstol Pablo escribió: “Doy gracias a mi Dios cada vez que me acuerdo de ustedes…” (Ver Filipenses 1:3; 4:6; 1 Timoteo 1:3; Efesios 1:16; 1 Corintios 1:4, etc.). Pablo parece haber hecho de esto un hábito. Es un hábito que quiero adoptar.

Oremos: Gracias, Oh Dios, por aquellas personas que han tocado nuestras vidas y por aquellos que nos han servido con gran sacrificio. Muéstranos la forma en que podríamos ser una bendición para ellos este día. Amén.

¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!