Sólo un Poco de Fe…
El día de hoy, estoy profundamente agradecido por aquellos de ustedes que han apoyado a la Fundación Dial Hope (Digita Esperanza) con una donación financiera. La esperanza llega a los demás por ti. ¡Gracias!
Había una mujer en una comunidad que era bien conocida por su fe simple y su gracia bajo presión. Ella había soportado muchas pruebas y dificultades en la vida – y sin embargo seguía siendo vibrante y llena de esperanza. Otra mujer que nunca la había conocido, pero que había oído hablar de su fe, vino a visitarla un día. Ella se dijo a sí misma: “Ella está tan a gusto con la vida y parece tener una paz tan grande a pesar de sus dificultades. Quiero saber por qué.”
Cuando finalmente se encontraron, el visitante comentó: “Así que tú eres la mujer con la gran fe de la que tanto he oído hablar.” “No,” fue la respuesta. “¡Yo no soy la mujer con gran fe, pero soy la mujer que le tiene fe al gran Dios!”
El ángel que se reúne con Sara y Abraham para decirles que tendrán un hijo en su vejez, le pregunto a la pareja de ancianos: “¿Acaso hay algo imposible para el Señor?” (Génesis 18:14)
Una pregunta similar se le hace a Jeremías: “¿Hay algo imposible para mí? (Jeremías 32:27)
Luego, cuando el ángel Gabriel se aparece a María para decirle que ella dará a luz al Mesías, él le dice a ella: “Porque para Dios no hay nada imposible.” (Lucas 1:37)
Más tarde, el mismo Jesús hace eco de esta promesa: “Para Dios todo es posible.” (Marcos 10:27)
Adoramos a un gran Dios. No es que Dios vaya a contestar cada oración cuando o como nos gustaría. No. Sin embargo, podemos confiar en que Dios nos ayudará a sortear las pruebas y las dificultades de la vida. Y si estamos abiertos a ella, la paz de Cristo, que sobrepasa todo entendimiento, estará con nosotros aun en medio de la tormenta.
Oremos: Amado Dios, hoy oramos incluso por un poquito de fe – fe suficiente para poner nuestras cargas y preocupaciones en tu trono llena de gracia. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!
