Una Sonrisa y Un Saludo
Una palabra de agradecimiento se extiende a todos los que tan generosamente apoyan al ministerio Dial Hope (Digita Esperanza). La esperanza es posible debido a ti.
Había un artículo en un diario de Jacksonville, hace varios años, sobre una pareja que se sentaban en el césped, del patio delantero, cada tarde y saludaban a todos los que pasaban. De 4-7 p.m., culminando a la hora de la cena, sacaban sus sillas, sonreían y saludaban. Se leía en el artículo periodístico: “A pesar de sus propios problemas financieros como dueños de una pequeña empresa…la familia Brown encuentra que sus sesiones de saludo son gratificantes.”
Ellos han estado haciendo esto ahora por más de 25 años y se han convertido en un elemento básico en su vecindario. Algunas noches, los vecinos sacaban sus propias sillas y los acompañaban. En Navidad, reciben regalos de personas que ni siquiera conocen. Están propagando buena alegría; han logrado que su vecindario sea más generoso por dicho gesto y ¡su alegría es contagiosa!
No todos podemos colocar sillas en el césped del patio delantero y pasar tres horas cada noche. Pero, todos podemos encontrar formas de invertir en nuestro vecindario. Todos podemos conocer a los que viven a nuestro alrededor. Y todos podemos encontrar maneras de compartir un poco de alegría, un poco de esperanza y amor con el mundo que nos rodea.
Oremos: Dios de gracia, te agradecemos por las buenas noticias que elevan nuestro espíritu. Gracias por personas como la familia Brown, quienes nos inspiran a hacer de este mundo un lugar un poco mejor. El día de hoy, muéstranos cómo podríamos ser tu luz y tu amor por un mundo que lo necesita tan desesperadamente. Amén.
¡Por favor siéntanse libres en compartir este mensaje con familiares y amigos!