La Oración Nos Cambia

Existe una historia acerca de un niño quien se portaba mal – y fue enviado a su cuarto como castigo. Su mamá finalmente entro a hablar con él y el niño dijo, “Mamá, he estado pensando sobre lo que hice y dije una oración.” “Eso está bien”, ella respondió. “Si le pides a Dios que te transforme en una buena persona, Dios te ayudará.” Oh, yo no le pedí a Dios que me cambiara en una buena persona,” Respondió el niño, “¡Yo le he pedido a Dios que te ayude a comprenderme!”

Aunque el niño oró para que su mamá le tuviese más paciencia, yo espero que Dios también le haya dado al pequeño más compasión hacia su pobre madre. Yo creo que las oraciones cambian las cosas. Pero, también creo que las oraciones nos cambian.

Jesús dijo, “Pide y se te dará…” Solamente tenemos que recordar que Dios no siempre nos responderá nuestras oraciones de la forma y el tiempo que nos guste.

Oremos: Dios de Gracia, te agradecemos por todas las oraciones respondidas en el transcurso de los años. También de agradecemos por oraciones que no fueron respondidas – deseos que tuvimos que ahora reconocemos que eran innecesarias o perjudiciales. Te agradecemos por bendiciones sobre bendiciones. Pero también confesamos que ha habido momentos que hemos orado con toda la fe e integridad y no entendemos por qué dichas oraciones no fueron respondidas. Somos humanos. Somos de carne y hueso, y luchamos con dicho hecho. El día de hoy, reúnete con nosotros en nuestra necesidad, bríndanos tu paz. Confiamos que eres bueno y que tienes nuestro mejor interés en el corazón. Y oramos con Jesús, no por mí voluntad, pero hágase tu voluntad. Amén.

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