Si Ellos Claman a Mí…

No hace mucho, mientras leía la Biblia para mis devocionales, me sentí atraído a todos los lugares en donde las personas claman por el Señor. Es impactante para mí que a lo largo de las sagradas escrituras las personas claman a Dios – muchísimo – individualmente y como toda la comunidad juntos. Claman cuando están siendo lastimados, oprimidos, hambrientos, pobres, perdidos, y cuando se sienten lejos de Dios. Y lo más hermoso es que cuando las personas claman, Dios responde. Dios responde.

Pareciera que hubiese algo acerca de llegar al punto en donde sabemos que estamos necesitados de la gracia de Dios; necesitados de la sanación de Dios – que nos mantiene abiertos a recibir dicha sanación. Cuando te encuentres en los lugares peligrosos y difíciles de la vida, recuerda los testigos de nuestras sagradas escrituras – Dios es fiel. En el libro de Éxodos, Dios dijo: “Si ellos me piden ayuda…yo te aseguro que atenderé a su clamor.”

Oremos: Oh Dios nuestro Señor, tú eres nuestra luz y nuestra salvación, ¿A quién le vamos a temer? Nosotros recordamos que, una y otra vez, les has respondido a todas aquellas personas que se han acercado a ti. Hemos llorado y tú nos has salvado. Hoy te clamamos una vez más. Clamamos por aquellos que están solos, aquellos que sienten que todo el peso del mundo está sobre sus hombros, por aquellos que están desesperados por sanación, o por amor, e inclusive por comida y albergue. Clamamos a ti por todos aquellos que están en camino del peligro. Ven guárdanos y protégenos. Ven y rescátanos, sánanos y bríndanos consuelo. Ven y enséñanos el camino hacia una nueva vida. Amén.

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